El rostro de la niña es dulce, el de la muñeca ..... no precisamente. Si esa niña fuera yo, no habría jugado con una muñeca tan rígida. No habría existido coloquio. Vamos con el niño..... si, si, habría jugado con la peonza que lleva en su mano derecha. Mucho más divertido, donde va a parar. Habría coloquio con la peonza. Beso.
No es Madrid, pero podría serlo, Omar. Es un territorio especial el de las tiendas donde arreglan juguetes y otros objetos domésticos quebrados. Al niño le llamaba la atención la muñeca un poco siniestra.
Por cierto, en efecto, tú puedes ser ese niño, o yo mismo...cuán absortos no habremos estado ante los escaparates más extraños, que nos llamaban la atención...
Te aseguro, Emejota, que el niño estaba absolutamente colgado de una peonza manual, que no soltaba ni para hacerla bailar casi...Comparto tus criterios sobre la ríigida y aristocrática ¿muñeca? ¿O una imagen religiosa? Porque en esa tiendan también arreglan imágenes no muy valiosas pero con desperfectos.
eso es Madrid!!!
ResponderEliminarEstuve...estuve ahí...
impresionante...ma has pillado hablando con la muñeca
saludos para vos
El rostro de la niña es dulce, el de la muñeca ..... no precisamente. Si esa niña fuera yo, no habría jugado con una muñeca tan rígida. No habría existido coloquio.
ResponderEliminarVamos con el niño..... si, si, habría jugado con la peonza que lleva en su mano derecha. Mucho más divertido, donde va a parar. Habría coloquio con la peonza. Beso.
Esa muñeca tiene mucha historia...
ResponderEliminarNo se si al niño le vendría bien ese diálogo...Besos desde el aire
No es Madrid, pero podría serlo, Omar. Es un territorio especial el de las tiendas donde arreglan juguetes y otros objetos domésticos quebrados. Al niño le llamaba la atención la muñeca un poco siniestra.
ResponderEliminarPor cierto, en efecto, tú puedes ser ese niño, o yo mismo...cuán absortos no habremos estado ante los escaparates más extraños, que nos llamaban la atención...
ResponderEliminarTe aseguro, Emejota, que el niño estaba absolutamente colgado de una peonza manual, que no soltaba ni para hacerla bailar casi...Comparto tus criterios sobre la ríigida y aristocrática ¿muñeca? ¿O una imagen religiosa? Porque en esa tiendan también arreglan imágenes no muy valiosas pero con desperfectos.
ResponderEliminarA ver, Rosa, a ver...tú sabes algo sobre esa muñeca. Desembucha, porfa. Somos todo oídos. No se lo contaré al pequeño.
ResponderEliminarhttp://vanalaire.blogspot.com/2011/04/fue-sin-querer.html
ResponderEliminarHistoria de la muñeca. Espero que os guste.
Besos desde el aire
Me voy a leerlo, Rosa. Gracias.
ResponderEliminar