Gabriela. ¿Adviertes que el individuo está borroso? Siempre borroso, más incluso que la grey y la conducción, pero tiene que sobreponerse a esa borrosidad. Sólo de él depende que los otros estados y movimientos queden postergados y superados.
Claro que me sugieren, mi querido amigo, pero cargado de voces en mi cabeza que me dictan algo que torpemente llamo poesía, tengo varias apreciaciones. Me quedaría con El Alma, porque así me la imagino. Un saludo fraterno. PD He tomado una foto tuya para crear un poema llamado 'abiertas al adiós' (deletrasarte.blogspot) espero no haber arruinado el cariño que le tienes a tu instantánea.
Por favor, Enletras, es que me elogias al tomar una foto. Todas las que quieras, están para eso, para que apoyemos nuestras colaboraciones y mantengamos una Red fecunda, solidaria y dialogante. Las fotos sirven hasta para convertir el pensamiento único (por otra parte, inexistente, ja)
Alejandro, estoy de acuerdo. Rojo y negro. Creación y destrucción. Ocupación y vacío. Elevación y caída. Vida y muerte. Por ejemplo. Pero son indisolubles. Y su fuerza y armonía reside en su vínculo. Cuando están juntos son potencia esperanzada.
Gracias por pasarte por el blog. Saludos desde este lado.
La sombra reflejo de la luz.
ResponderEliminarla luz acreedora siempre de la sombra.
Me quedo con el individuo, para mí es un cauce poderoso, aunque sin perder nunca de vista el lecho, la conducción y la grey.
Magnífica serie, como no,... cuando una se asoma a tu espacio siempre se va un poco más plena.
Un abrazo
Gabriela Amorós - La Emoción indomable
¿será posible?
ResponderEliminarMe llenas de tanta imaginación que temo comentar.
Buenísima toma, un fuerte abrazo
Gabriela. ¿Adviertes que el individuo está borroso? Siempre borroso, más incluso que la grey y la conducción, pero tiene que sobreponerse a esa borrosidad. Sólo de él depende que los otros estados y movimientos queden postergados y superados.
ResponderEliminarUn abrazo.
Enletra...si no comentas que sea porque no te sugiere, pero no por temor.
ResponderEliminarUn abrazo desde el magma.
Claro que me sugieren, mi querido amigo, pero cargado de voces en mi cabeza que me dictan algo que torpemente llamo poesía, tengo varias apreciaciones.
ResponderEliminarMe quedaría con El Alma, porque así me la imagino.
Un saludo fraterno.
PD He tomado una foto tuya para crear un poema llamado 'abiertas al adiós' (deletrasarte.blogspot) espero no haber arruinado el cariño que le tienes a tu instantánea.
Por favor, Enletras, es que me elogias al tomar una foto. Todas las que quieras, están para eso, para que apoyemos nuestras colaboraciones y mantengamos una Red fecunda, solidaria y dialogante. Las fotos sirven hasta para convertir el pensamiento único (por otra parte, inexistente, ja)
ResponderEliminarQuise decir combatir en lugar de convertir. No me siento misionero y menos del pensamiento de la oligarquía.
ResponderEliminarExcelente foto, el rojo y negro simbolizan tantas cosas en la mente...
ResponderEliminarAlejandro, estoy de acuerdo. Rojo y negro. Creación y destrucción. Ocupación y vacío. Elevación y caída. Vida y muerte. Por ejemplo. Pero son indisolubles. Y su fuerza y armonía reside en su vínculo. Cuando están juntos son potencia esperanzada.
ResponderEliminarGracias por pasarte por el blog. Saludos desde este lado.